Una historia muy especial #dialactancia

Esta primera semana  de Agosto se celebra la Semana Mundial de la Lactancia, y a través de maternidadcontinuum el deseo es transmitir el apoyo a la lactancia en nuestros blogs.

En otra entrada les conté mi primer encuentro con la lactancia (aquí), así que a través de ella también expreso mi experiencia y mi deseo de transmitir lo hermoso que es amamantar a nuestros hijos. Pero como dice el lema este año: cercano, continuo y oportuno, quien mejor que mi hija para contar su experiencia con su tetita. Trataré de expresar fielmente sus gestos, caras, reclamos, llantos, y/o risas cuando la quiere o no!!!

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¿Te acuerdas cuando la vi por primera vez? Fue amor a primera vista, no se puede explicar!!, simplemente sabía que tenía que tenerla. La sentía, la olía, y tu me ayudaste; me llevaste hasta ella. Desde ese día la quiero!!!. Aprendimos juntas a cómo tomarla bien, porque yo no llegaba y me agobiaba no poder moverme como quería. A veces quedaba incómoda y tenía que acomodarme. Pero tu estabas ahí. Otras veces la buscaba buscaba, abría la boca buscándola a tientas, y tu estabas ahí. ¿Te acuerdas por las noches?  ¡Donde la tenías mamá!, jajajaja...sobre mi cara. Pero yo pensaba -¡pero si mi boca está más abajo! Pero siempre estuviste pendiente de mi. Que suerte tengo de tener mi teti siempre cuando la necesito. Gracias mamá, siempre cercana.

Mamá, pero porque te pones ese sujetador que no me deja tocarla entera!!!. Aunque la verdad es que a veces me gusta, porque así tengo con qué jugar mientras tomo mi leche. Tirar y tirar de esa tela que hay por ahí me relaja. ¿Que dices?! ¿Que me quedo agarrada a ella?. Jijijiji, que te puedo decir!!, es que no quiero que termine y que te vayas de mi lado. Me gusta quedarme ahí tan calentita y cómoda. Somos una!!. Me recuerda a algo, aún no lo sé, pero conozco esa sensación de cercanía y tranquilidad.

Aunque te tengo que decir que a veces no quiero leche. ¿No me entiendes? solo quiero jugar! por eso lloro. Y de repente, la tengo frente a mi. Que puedo hacer!. Igual tomo algo porque me relaja, pero sólo por 1 minuto ¿vale? Pero gracias mamá, me gusta que siempre lo intentes y trates de entenderme, nunca dejas de hacerlo. Lo primero que me ofreces es lo que más me gusta, y me gusta porque es nuestro momento, te puedo tocar la cara, la boca y si tengo suerte, agarro un mechón de tu pelo. 

Ayy las noches. Es que a veces me despierto y no estoy tan cómoda. A veces siento hambre o frío, o calor!! (que difícil puedo ser, jijijijiji), y necesito mi teti. Por suerte siempre está ahí. ¿Estás conmigo siempre mamá? Porque me impresiona lo rápido que llegas y la tengo al lado. Me tranquiliza, me siento feliz feliz, y de repente me quedo dormida.

Mamá, si tengo días malos, si tengo noches malas, no me lo tomes en cuenta. Muchas veces yo tampoco sé lo que pasa. Pero por suerte tengo mi teti. La necesito cuando me siento mal. A veces no es hambre, solo necesito tenerla cerca. Hay otras veces quiero jugar con ella. Tampoco me tomes en cuenta cuando le pego un pellizco!jijijiji. Siempre luego te sonrío para que veas que me gusta, ¡es que me desespera, y me pone contenta!

Espero que muchos amigos tengan su tetita al lado, a mi me hace sentir bien y con ella ando feliz y sonriendo todo el día. Siempre tengo la oportunidad de tenerla, es algo continuo y por suerte significa que te tengo cerca para tocarte.

Gracias Mamá

Esta entrada se la dedico en especial a una amiga que es una excelente madre desde hace algunos meses, que optó por seguir dando el pecho. Porque detrás de una lactancia exitosa, hay una madre que lucha por su hij@; una madre cansada, muchas veces con falta de sueño, y porque no decirlo, muchas veces dubitativa frente a la lactancia, pero que sigue por el amor a su hij@. Una madre que muchas veces es criticada y desvalorada por la labor que realiza, por el futuro del mundo. Pero por suerte, poco a poco, paso a paso, es una madre ensalzada por su decisión. Que vivan las mujeres, las madres y su hij@s.